My Christmas time

Ya ha llegado la Navidad a casa, así que aunque con cierta dosis de pudor, os muestro un poco de intimidad. La decoración navideña en este piso de alquiler partía de 0. Hace 2 años nos pilló con el traslado y el año pasado sólo me dio tiempo a rescatar al niño Jesús de los adornos de mi casa anterior, para cuando quise ponerme a decorar la casa de Navidad, ya era 25 de Diciembre.. Así que inspirada por todas las fotos que he ido viendo, y he ido compartiendo con vosotros en el facebook, con un par de tonterías compradas en IKEA y con mis manitas, este ha sido el resultado.

Al niño Jesús de Belén, le he hecho una cama de bolas de felpa (Os conté que estaba detrás de la Pinocchio Rug, ¿no?. Bien, pues como es tan rematadamente cara, incluso su fake que con aduanas e historias también se pone imposible; decidí hacer un pedido al por mayor de bolas de felpa, si veía que no se me daba mal coserlas y manejarlas igual me planteaba hacer yo misma la alfombra, y si no, tenía otras cosas pensadas qué poder hacer con ellas; una de ellas era esta, sustituir la clásica cama de pajas por las bolas de felpa). Así que ahí descansa esta Navidad el niño Jesús, rodeado de unos antiguos candelabros de IKEA.






Siempre he tenido claro, que ya que en el salón no tenemos cortinas (con las montañas y el mar enfrente de casa, qué queréis que os diga pero sería un pecado tenerlas; quizás faltara un estor, pero ¿Para qué? si puede que en otra casa no nos sirva la medida); por lo que la Navidad es el motivo perfecto para enmarcar el paisaje (sobre todo si nieva) y hacerle unas cortinas a medida (Además si sale bien, puede que pruebe a hacerlas con bolas de felpa). Me gasté unos 18 €, en la estrella grande y las bolas de la ventana, y unos 5 en la cinta. Y he dedicado un par de horas mientras veía alguna película a hacer recortables y coserlos. Las ramas las cogí de la calle, e hice las estrellas. A los lados unas guirnaldas de luces de IKEA, de unos 2,5 € cada una.










Me faltaba el árbol, y la verdad que en esta casa no está hecha como para un árbol grande, así que las ideas de las ramas (casi troncos en algún caso) haciendo de árbol me venían al pelo. Lo de dibujarlo en la pared me gusta, pero tampoco tenemos en casa el paño adecuado para ello, y tengo que reconocer, que también me da miedo que se fastidie la pintura. Así que salimos a la calle en busca de un palo, y como eso de ir rompiendo ramas es un poco incivilizado, te vas conformando con lo que recoges por el suelo, pero de repente ahí está. Cuando fuí a comprar las cajas de zapatos a IKEA, no me pude resistir a un set por 7€, corazones, estrellas, paquetes de regalo, lo típico y en un número adecuado. Lo siguiente, pintar parte de la rama del árbol de blanco, limpiarlo de bichos, colgarle los adornos del set de IKEA, una de las estrellas hechas por mis manitas con ramas, y una guirnalda de bolas de felpa negras. Y todo ellos descansando en una de las damajuanas por las que pujé en una subasta hace unas semanas.








Este ha sido el resultado.





Ahora sólo me queda una corona para la puerta, ¿Me atreveré con algo parecido a esto?






2 comentarios :

  1. Ana......me tienes absolutamente entregado, con esta capacidad creativa tuya. Absolutamente genial. Me encanta vuestro piso, y el aire que le das, con cada una de tus ideas. Besos

    ResponderEliminar
  2. Gracias BIOKinta! A veces, tener las posibilidades reducidas (al ser alquilado) hace que desarrolles mucho más la imaginación y casi siempre es un acierto!

    ResponderEliminar